Bienvenido a la oficina privada del expresidente de la República, Patricio Aylwin Azócar, un espacio destinado a preservar su memoria y difundir su legado.

Ubicada junto a la que fuera por 60 años la vivienda particular de la familia Aylwin Oyarzún, esta casa, conocida como “la oficina de don Patricio”, fue testigo de importantes reuniones con diversas autoridades nacionales e internacionales, punto de encuentro con jóvenes y centro de las innumerables actividades que el exmandatario promovió.

Tras su fallecimiento, en abril de 2016, el inmueble fue refaccionado y hoy es la sede de la Fundación Patricio Aylwin. 

El escritorio y la sala de reuniones han sido conservados tal como como estaban originalmente, incluyendo el mobiliario, las obras artísticas, objetos, fotografías y libros.

En la zona donde antes se ubicaban la secretaría y la sala de espera, se habilitaron dos salas de exhibición; una que da cuenta de la vida de don Patricio, y otra, dedicada específicamente a los cuatro años de su mandato presidencial.