El miércoles 19 de octubre culminó el ciclo de tres talleres “NIÑOS Y APODERADOS DESBORDADOS” ¿CÓMO PODEMOS TRABAJAR CON ELLOS?” que ofreció la Fundación Patricio Aylwin a docentes de los colegios Sagrado Corazón y Bicentenario Aprender de la Corporación Aprender.
“Mis escenas temidas”. “¿Qué siente esta niña o niño? ¿Qué siento yo y qué hago?”. “Apoderados desbordados ¿Qué me produce?” constituyeron los temas en torno a los cuales se trabajó en los talleres.
Los dos primeros talleres estuvieron focalizados en el desarrollo de habilidades para enfrentar situaciones de desborde emocional en niños y niñas de 1er. ciclo básico. Utilizando una metodología que combina ejercicios en grupos pequeños sobre situaciones de su propia práctica, análisis y reflexión, se buscó que las y los participantes pudieran identificar las emociones en el trasfondo de las conductas de niños desbordados; fortalecer su capacidad de autorregular el contagio emocional y la empatía ante la presencia de emociones muy intensas de los niños; ampliar el abanico de manejo de situaciones de desbordamiento al interior de la sala de clases; e identificar recursos de autocuidado para prevenir el desgaste laboral (burnout) asociado a este tipos de situaciones.
En el tercer taller, centrado en situaciones vividas con apoderados, se utilizó la misma metodología. En este caso se buscó que las y los docentes pudiesen ampliar el repertorio de estrategias para el manejo de desbordes de apoderados, considerando lo que les pasa a ellos en tales situaciones, y el autocuidado.
La participación en los subgrupos y plenarios fue activa y entusiasta. En la evaluación final destacaron especialmente el hecho de trabajar sobre situaciones concretas de su propia práctica, intercambiar experiencias entre colegas y el poder analizar y ejercitar distintas formas de abordar una situación específica.
Algunos de los testimonios de los y las asistentes a los talleres fueron:
Estoy satisfecha con la metodología elegida. En esto no hay recetas. Hay que ejercitar, ejercitar, ejercitar.
En estos talleres pude compartir con personas distintas y me voy con más herramientas.
Aprendí que comprender mis propias emociones ayuda a comprender la de otros, especialmente de los niños.
Conocí diferentes perspectivas de una misma situación con diferentes formas de abordarla
Nos sirve mucho esto, en un año tan complicado. Me da más seguridad.